No podemos tapar el sol con un dedo

Hay que reconocerlo. Hay cosas que no se deben decir y verdades que debemos callar pero también hay mentiras que no podemos guardar, acabaríamos explotando y todo sería bastante pero que bastante peor. Somos dados a malinterpretar las situaciones, a ver lo negativo de las cosas y si te fijas en lo positivo de bueno, acabas siendo tonto. Sí, eso es cierto. Vale, es mejor una verdad dolorosa que una mentira piadosa pero a veces esa verdad, duele demasiado, entonces, ¿qué hacemos? No podemos tapar el cielo con tan solo un dedo, ni podemos tocar las nubes con solo creer en el amor. No podemos fiarnos de nada, ni de nadie, ni si quiera de nuestra propia sombra. En el mundo existen más personas además de tú, debes tener claro que no eres el centro del universo y que nada gira alrededor tuya, los demás no van a velar por tu felicidad, ¿te imaginas? Si fuera así en el mundo no habría problemas. Pero esa no es la situación. "Un clavo saca a otro clavo". Sería mejor "una mentira continúa a la anterior", sí, hacen mentiras a pedido pero no podemos vivir a base de ella, supuestamente, intentamos encontrar siempre la verdad y luchar por ella. ¿Qué ocurre entonces? Que volvemos a la conclusión que ya habíamos sacado pero un tanto modificada: no podemos tapar el sol con un dedo, no podemos tampoco intentar cubrir la luna y no podemos contar todas las estrellas del cielo, hay cosas que se nos escapan y que no vemos.